No hay dudas que la comida chatarra es sinónimo de mala alimentación. Utilizando este presupuesto instalado en la sociedad, Tight Club, un gimnasio de Canadá, aprovechó los formatos de packs de productos de este tipo para regalar clases gratuitas.

La agencia Rethink, creó productos como calorías vacías, derrota carbonatada, arrepentimiento salado y bajón de azúcar en los que se podía obtener las clases gratuitas en el gimnasio. Los productos son colocados en las góndolas de los supermercados para que sean comprados.