Reposteamos el artículo de Mariluz Soto Hormazabal publicado en FOROALFA sobre la creatividad y la innovación,  a partir de las reconfiguraciones que podemos realizar a nivel mental.

Mariluz Soto Hormazabal

Reconfiguraciones para diseñar e innovar

Las configuraciones que componen nuestras experiencias y
conocimientos pueden estar en constante reconfiguración. Es posible
quitar las estructuras mentales para potenciar la creatividad.

Todas las experiencias nos configuran y
esto se aplica en todos los aspectos de nuestra vida, en las acciones y
actividades que desarrollemos. Influye en los conocimientos, emociones,
conductas, objetivos… en todo aquello que realicemos o queremos
realizar.

Al enfrentar un nuevo proyecto, de cualquier tipo, nuestros primeros
pensamientos y soluciones, provienen de nuestras estructuras mentales,
aquellos conocimientos establecidos en nuestro cerebro y que generan
automáticamente respuestas.  En este sentido, la reconfiguración de
aquello que tenemos preestablecido, es una etapa fundamental para
adquirir nuevos conocimientos y experiencias basándonos en la
exploración a través de la investigación y observación atenta y
estratégica.  Este proceso cognitivo, emocional y exploratorio nos da la
posibilidad de convertirnos en  actores que participan en la
transformación de patrones establecidos y generadores de nuevas miradas
del mundo.

Para el diseño esta es una etapa vital que puede determinar la
estrategia, el nivel de impacto o la ayuda a la humanidad. La
reconfiguración nos permite crear mirando desde otro punto de vista,
abstraernos de juicios e ideas que limitan la creatividad. El diseñador,
idealmente, debe mantenerse en constante aprendizaje, sensible y
objetivo, para desarrollar o fortalecer la capacidad de comunicar a
través de medios visuales y sensoriales.

Reconfigurarnos permanentemente, observar todo, preguntarnos y hacer
las preguntas, involucrarnos con nuestro entorno, participar de nuestras
comunidades, nos mantiene en un esquema no rígido. La constante
búsqueda de más conocimientos nos permite desarrollar cada proyecto
desde una perspectiva innovadora y creativa, pensar en la experiencia
que vivirá cada persona con nuestro diseño y cómo éste puede contribuir a
la comunicación del mundo es lo que, según mi punto de vista,
constituye la belleza del diseñar.