La sustentabilidad es un tema crucial a la hora de hablar del presente y el futuro y en el diseño es un eje temático fundamental si pensamos en la naturaleza de la disciplina. Las fuentes ecológicas son una idea polémica que pone de manifiesto una cuestión clave acerca de la efectividad funcional de este tipo de proyectos.

Todo comenzó en 2014, cuando un estudiante de sexto grado propuso que podría ahorrarle al gobierno más de $ 400 millones al cambiar a una fuente diferente que usara menos tóner de tinta y, por lo tanto, ahorrara tinta y dinero. Desafortunadamente, no es tan fácil. Su recomendación fue cambiar la fuente del gobierno a Garamond de Times New Roman porque habría un ahorro del 30% en tinta y dinero. Pero hay un problema fundamental: Garamond es una fuente más delgada.

Como se puede ver, Garamond es significativamente menos legible y más pequeño que Times New Roman en 12 puntos. (Brownlee, John)
Según John Brownlee, diseñador y escritor de Fast Company, para tener la misma legibilidad y accesibilidad que algo como Times New Roman, es necesario aumentar el tamaño de la fuente. Cuando se aumenta el tamaño de la fuente, el ahorro de tinta desaparece. Esto se debe principalmente en parte a que la altura x de la fuente de Garamond es mucho más baja que la de Times New Roman. Para crear la misma legibilidad que Times New Roman y garantizar que los documentos gubernamentales sean accesibles para todos, el tamaño de fuente de Garamond tendría que aumentar, eliminando efectivamente todos los ahorros de tinta.

No podemos abandonar la accesibilidad de la información y el diseño en nuestro trabajo simplemente para ahorrar una minúscula cantidad de tinta. Debemos asegurarnos de que nuestros mensajes y diseño no excluyan a otros.

En definitiva es mucho más valioso considerar las opciones de stock de papel, el método de impresión y también el tipo de tinta que se utiliza en pos de un diseño ecológico.

Lo vimos en LITTLEFOX.